Desde Madrid hasta Buenos Aires, pasando por París y Ginebra, miles de paraguayos se movilizaron este domingo para exigir respeto a sus derechos como migrantes, denunciar la corrupción y reclamar políticas públicas que los incluyan. La Coordinadora de la Migración Paraguaya habla de una marcha histórica.
Luego de 25 años del conocido Marzo Paraguayo, familiares de mártires siguen recordando esa fecha con tristeza y patriotismo. Gladys Bernal, madre de uno de los fallecidos, señaló que recuerda perfectamente ese 26 de marzo de 1999 y lamentó la situación actual de la justicia.
Madres, familiares y amigos de los mártires del Marzo Paraguayo de 1999 no lograron ingresar a la Plaza de Armas, lugar donde están erigidos monumentos en honor a quienes perdieron sus vidas durante las protestas desencadenadas por la crisis política de la época.
Fue un día miércoles 23 de marzo de 1999 cuando ocurrió el magnicidio de Luis María Argaña, en plena capital del país. Ese hecho desató el inicio del denominado “marzo paraguayo”, que culminó con la muerte de varios jóvenes y sentó en el sillón presidencial a Luis Ángel González Macchi.
En la noche del 26 de marzo de 1999 miles de jóvenes se volcaron a las calles exigiendo la destitución del entonces presidente de la República, Raúl Cubas Grau, quien afrontaba un juicio político y era cuestionado por el magnicidio del vicepresidente, Luis María Argaña. Cubas, aferrado a su cargo, buscaba estrategias para evadir la decisión del Congreso mientras la ciudadanía exigía su salida. En medio de las protestas, un grupo de francotiradores disparó contra los manifestantes, siete de los cuales perdieron la vida.
A cinco años de la noche de marzo del 2017 en que vimos arder el Congreso en el centro de la capital de Paraguay, la imagen del edificio en llamas sigue siendo para muchas personas un símbolo de rebeldía. En este artículo, la poeta anarquista Montserrat Álvarez explica por qué ese símbolo le resulta indiferente.