En un colegio de Asunción, denunciaron hoy que la proveedora del almuerzo escolar del programa Hambre Cero, sirvió un plato de picadito de pollo con puré que era “más caldo que picadito”. Además, la ensalada de frutas solo tenía algunos pedazos de manzana en medio de abundante agua. La empresa, Comepar, afirma que no recibió denuncias en esa institución educativa.
La falta de infraestructura es la principal dificultad que enfrentan las instituciones educativas de Alto Paraná para recibir los alimentos del programa Hambre Cero. Los concejales departamentales se reunieron con el gobernador de Alto Paraná para abordar sus inquietudes y, posteriormente, el Ejecutivo departamental participó en la sesión de la Junta Departamental.
El ministro de Desarrollo Social, Tadeo Rojas,aseguró que habría motivaciones políticas en las denuncias sobre el supuesto mal estado de un caldo de cerdo servido en una escuela de Central. El titular del Sindicato de Directores, Miguel Marecos, manifestó supuestas tergiversaciones y defendió el plan, mientras que el MEC se pronunció sobre la circular que advierte a directores sobre las consecuencias de controlar la calidad del almuerzo escolar.
La Unión Nacional de Educadores Sindicato Nacional criticó la que considera una actitud irresponsable y arrogante de los ministros de Educación y Ciencias y Desarrollo Social, ante las denuncias sobre la implementación de Hambre cero. No descartan tomar medidas gremiales ante las amenazas y amedrentamientos contra más docentes y directores.
Madres de la escuela San Jorge, de Mariano Roque Alonso, donde se había denunciado la provisión de un caldo de cerdo en mal estado por parte de la empresa Comepar, criticaron duramente a los ministros de Educación y Desarrollo Social por actuar en favor de la empresa responsable. Se preguntaron si estas autoridades tienen intereses particulares en esta empresa, y pidieron cambio de ministros.
La Federación Nacional de Estudiantes Secundarios emitió un comunicado en el que acusan al Gobierno de utilizar el programa Hambre Cero como herramienta de populismo político y de jugar con la alimentación de sus compañeros. Los estudiantes critican que la respuesta del Gobierno sea amenazar a los docentes y directores que denuncian.