El presunto capitán de la organización criminal brasileña Primer Comando da Capital (PCC) Marcelo Rogerio Gnoato (37), alias “Alemão”, ingresó a territorio paraguayo poco antes del inicio de la pandemia y comenzó a coordinar las acciones de la facción en la zona de Saltos del Guairá. El capo mafioso detenido esta mañana en la capital de Canindeyú escapó de una cárcel del estado de Paraná y entre los tatuajes que tiene en el cuerpo hay dos imágenes de payasos, lo que confirma su participación en la muerte de al menos dos policías.
La organización Semillas para la Democracia expresa su profunda preocupación por la situación de la presencia del crimen organizado, el lavado de dinero y la evidente corrupción que hay en la democracia. Instan a la ciudadanía a evitar este retroceso y ponerle fin a esta larga historia de impunidad política.
El allanamiento que terminó con un miembro de la ACA-EP abatido y tres detenidos fue llevado a cabo gracias a una investigación de la Policía, no de la FTC. Lo admitió el propio ministro del Interior, quien justificó la falta de resultados contra el EPP diciendo que esta organización criminal es omnipresente.
En la investigación denominada “Caso Berilo”, el 5 de abril de 2018 se realizó la intervención, registro y grabación de comunicaciones, autorizados por resolución judicial. Esto permitió constatar la existencia de una organización criminal dedicada al tráfico internacional de estupefacientes y drogas peligrosas que introducía al país cargamentos de cocaína provenientes de Perú y Bolivia, que luego eran llevados a Alto Paraná para su posterior remisión al Brasil.
Durante un enfrentamiento registrado en la ciudad de Florianópolis, estado de Santa Catarina, Brasil, entre integrantes de la Fuerza de Tarea encargada de la Operación Omertá, murió uno de los considerados “hombres fuertes” de Fahd Jamil Georges. Se trata de Thyago Machado Abdul Ahad, sindicado como uno de los pistoleros de la organización criminal comandada por Fahd Jamil.
El abogado Guillermo Ferreiro dio duras declaraciones contra la Fiscalía General del Estado y manifestó que representa la mayor organización criminal que opera en el país, por lo que su titular, Sandra Quiñónez debe someterse a un juicio político. El argumento de Ferreiro tiene relación con la total inacción ante los numerosos casos de mujeres desaparecidas.