Siguiendo con la “saga de vergüenzas legislativas” cada vez más frecuente en Paraguay, basada en privilegios inmerecidos a los conocidos “nepobabies”, ni bien iniciaba el actual periodo parlamentario, se estrenaba un nuevo “episodio” de clientelismo. Esta vez con la actuación estelar del presidente del Congreso, Basilio “Bachi” Núñez (ANR, cartista), quien, a la par de sus colegas, está peleando fuertemente por llevarse el “Óscar” de la desvergüenza. La información que tomó estado público no deja de asombrar a la ciudadanía, y nuestros políticos paraguayos no cesan en su intento de hundir cada vez más la confianza del pueblo paraguayo. Sin rubor ni pudor, se pudo constatar que en sus apenas ocho meses de mandato, el mandamás del Congreso procedió a nombrar en altos cargos directivos, con jugosos salarios que sobrepasan los 20.000.000 de guaraníes a mujeres bachilleres que apenas cuentan con la etapa escolar concluida, pero que ya ocupan cargos de alto mando dentro del Legislativo.
Pese a las denuncias realizadas por la ministra Sheila Abed en el año 2015, sobre la fiesta que realizó Carlos Sánchez en su lugar de reclusión tras la victoria municipal de su hermano Denilso, Tacumbú ni siquiera instruyó sumario.
Allegados, amigos y funcionarios que ingresaron por afinidad personal forman parte de una larga lista de privilegiados en la Fiscalía General del Estado. La mayoría percibe ingresos superiores a los G. 5.000.000, mientras el sueldo de un asistente fiscal –que desempeña una importante labor para la institución y la ciudadanía– es de G. 4.777.900, a los que se suman G. 1.500.000 de bonificación. Uno de los casos afecta a la tía de Díaz Verón.
A medida que se revisan los documentos en las facultades de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), van saltando nombres de privilegiados por la administración del exrector preso en Tacumbú, Froilán Enrique Peralta.
En ocasión de las negociaciones del contrato colectivo de condiciones de trabajo (CCCT) del año 2014/15 entre la Itaipú Binacional (IB) y sus empleados, el director administrativo ejecutivo paraguayo manifestó en un momento que los trabajadores de la IB somos unos privilegiados, por lo tanto, no correspondía peticionar ni un beneficio a más de los que están ofreciendo los negociadores de la entidad. El Sr. director tenía razón cuando habló de “privilegiados”. Veamos quienes son los privilegiados en la Itaipú.
El presidente del Senado, Alfredo Jaeggli, otorgó la oficina de mayor amplitud y con mejor vista del Senado al senador colorado Juan C. Galaverna, argumentando que es el “decano” del Congreso, ya que este será su quinto periodo consecutivo como legislador.