18 de junio de 2025
Son más de 2.500 pobladores de las comunidades de Toro Pampa, San Carlos y María Auxiliadora de este distrito chaqueño, que si bien ya lograron reconectarse físicamente entre ellos, continúan atrapados sin poder salir hacia otras regiones del país. Piden a las autoridades de la Gobernación priorizar la reparación del camino que conduce a Fuerte Olimpo, y así poder romper el aislamiento que ya supera los 72 días.
Ante la falta de respuesta de las autoridades del Ministerio de Obras Públicas, para reparar los destrozados caminos de este departamento chaqueño, pobladores de la localidad de Toro Pampa, del distrito de Fuerte Olimpo, se unieron a los ganaderos en la tarea de recuperar los tramos. Reciben ayuda de la Municipalidad y aportes de personas solidarias, la famosa vaquita.
Mientras las autoridades nacionales pasan de reuniones y tramitando pura burocracia para llevar la reparación de los destrozados caminos, el grupo Ganaderos del Sur sacó sus maquinarias, contrató los servicios de una empresa e inició las tareas de reconstrucción de los caminos, ante la imperiosa necesidad de hacer llegar sus productos a los centros frigoríficos.
Tras la iniciativa de ganaderos del departamento de sacar sus maquinarias para iniciar la reparación del camino en aquellos tramos destruidos por las aguas, ahora también hace lo propio la Gobernación, y desde el miércoles, el equipo vial está trabajando en el camino Olimpo – Toro Pampa. El desafío es posibilitar una vía de salida hacia el río Paraguay a los pobladores de comunidades de Chaco adentro.
Ante la imperiosa necesidad de contar con caminos transitables, con el objetivo de trasladar los animales hacia los frigoríficos, los productores de este departamento chaqueño comenzaron a trabajar en la reparación de aquellos tramos que ya fueron liberados de las aguas. En tanto, en la zona de Agua Dulce, el trabajo es intenso, en procura de rehabilitar por completo este camino, que les permitirá el ingreso de las maquinarias cosechadoras para iniciar la cosecha de unas 40 mil hectáreas de granos.
En el Alto Paraguay, donde sus habitantes siguen viviendo en condiciones de pobreza desde hace décadas, la mayor necesidad, sin lugar a dudas, es contar con caminos transitables en cualquier época del año. Esto ayudaría a evitar los aislamientos que ocurren durante los días de lluvia.