¡Qué hermoso es ver una sonrisa con dientes sanos y bien blancos! Para tener una sonrisa que llame la atención por su belleza, debemos cumplir ciertos hábitos. Veamos algunos de ellos.
La sonrisa es un signo de amabilidad y empatía, y si de mejorar la nuestra se trata, hoy existe un aliado cuyo protocolo consiste en aportar al rostro un aspecto favorable mejorando la forma, el tono y el tamaño de los dientes.
Te quejás porque el cielo está gris, no tenés un guaraní y te espera mucho trabajo. Comparás tu vida con la de Calamardo y te das cuenta de que son igual de amargados. Sin embargo, siempre hay un Bob Esponja que te tira flores y te contagia con su risa.
Una hermosa sonrisa se logra con cuidados, y cuando aparecen patologías de la boca, la odontología propone “un maquillaje dental”. La estética se extiende a labios y encías, en un conjunto armónico adaptado a la fisonomía del paciente.
Todos quieren una sonrisa perfecta con dientes en buen estado, y gran parte del objetivo se alcanza cuando se realizan acciones como el tratamiento preventivo de caries, halitosis y el cuidado de porcelanas e implantes.
La odontología estética es una de las alternativas para alcanzar una sonrisa blanca y luminosa. Una opción para mejorar el aspecto personal sin muchas complicaciones y con resultados sorprendentes. Aquí, te explicamos de qué se trata.