23 de noviembre de 2024
En realidad es bastante obvio: si una pequeña luz sigue encendida en el televisor o el ordenador, aunque se hayan apagado, es que siguen encendidos: los dispositivos están en modo de espera o de reposo, y eso significa que consumen electricidad. Según la campaña del Gobierno alemán “80 millones, unidos en la transición energética”, el “stand by” cuesta hasta 60 millones de euros al año.