12 de abril de 2025
La desinformación ha sido utilizada desde los tiempos de César Augusto en Roma hasta los eventos más sonados de la política mundial actual. Hoy en día, no se contratan servicios para posicionar productos, marcas o gestionar impactos de alto nivel; más bien, se destinan altos recursos a sembrar información falsa, amplificarla para destruir reputación de rivales y competidores.