En las notas explicativas de los Estados financieros de Itaipú Binacional al 31 de diciembre de 2024, el hecho es descrito de manera neutra, como una “suspensión temporal” decidida por el Gobierno de Paraguay, sin explicar que la causa de fondo es un conflicto diplomático derivado de acciones ilegales de inteligencia.
“En reunión realizada el día 21 de febrero de 2025, las Altas Partes Contratantes acordaron que, hasta el día 30 de mayo de 2025, sería firmado el nuevo Anexo C del Tratado de Itaipu, en los términos de “Entendimiento entre Paraguay y Brasil sobre Directrices Relacionadas a la Energía de ITAIPU Binacional”, de fecha 16 de abril de 2024. Sin embargo, en fecha 01 de abril de 2025 el Gobierno del Paraguay anunció la suspensión temporal de las negociaciones sobre el Anexo C”, publica.

Esta omisión del motivo de la pausa de las negociaciones genera interrogantes sobre la transparencia de la información publicada, considerando que la renegociación del Anexo C afecta directamente aspectos sensibles como tarifas, costos de producción y distribución de energía.
El ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Rubén Ramírez Lezcano, quien además integra el Consejo de Administración de Itaipú como representante de la Cancillería (con voz pero sin voto), fue quien anunció oficialmente la suspensión de las conversaciones, tras confirmar el espionaje brasileño. “La injerencia en asuntos internos constituye una violación al derecho internacional”, afirmó el 1 de abril pasado Ramírez, señalando que el Gobierno paraguayo no podía seguir negociando mientras no se restableciera la confianza con Brasil.
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A pesar de la gravedad del hecho, los estados financieros mantienen un tono técnico y evitan cualquier referencia al conflicto político, aparentemente protegiendo de esa manera la imagen institucional de Itaipú ante terceros.
La decisión paraguaya también incluyó el llamado a consultas de su embajador en Brasil y la solicitud formal de explicaciones al embajador brasileño en Asunción, medidas diplomáticas de fuerte contenido simbólico.
Según se supo, la Agencia Brasileña de Inteligencia habría realizado operaciones de espionaje entre junio de 2022 y marzo de 2023, bajo instrucciones de la administración de Jair Bolsonaro.
La omisión del contexto en el informe financiero es vista por algunos analistas como una estrategia para evitar la afectación de la estabilidad jurídica y financiera de Itaipú, en un momento crítico para su renegociación. Pero también es vista como una debilidad de los representantes paraguayos en Itaipú, dado que como quedó redactado el informe, la imagen que queda es que simplemente Paraguay quiso suspender las negociaciones de manera unilateral.
“No podemos hablar de tarifas ni de futuro sin antes aclarar una violación tan grave de la confianza bilateral“, sostuvo Javier Giménez, ministro de Industria y Comercio y miembro del Consejo de Itaipú cuando se dio a conocer la interrupción de las negociaciones.
Mientras tanto, el Gobierno inició auditorías internas para evaluar el posible alcance de las operaciones de inteligencia, y espera la respuesta oficial del gobierno de Lula da Silva.