30 de abril de 2025
La partida de la reconocida artista plástica María Carlota «Lotte» Schulz a los noventa años de edad hace dos semanas pone fin a una trayectoria vital y creadora cuyo término supone una pérdida, pero no una ausencia: de tener presente y abierto como fecundo tema su aporte se encarga la memoria de sus pares; en este caso, la del escritor Jesús Ruiz Nestosa, que la recuerda desde Salamanca.
Nacida de una paraguaya y un austrohúngaro llegado a Paraguay después de la Primera Guerra Mundial en el distrito de Cambyretã –el «País de la Leche», en guaraní– del departamento de Itapúa, a orillas del río Paraná, en 1925, la reconocida artista plástica María Carlota «Lotte» Schulz falleció el pasado viernes 22 a los noventa años. La siguiente mirada retrospectiva sobre su trayectoria vital y creadora –marcada, pese a su extensión temporal, por el momento de actualización formal de nuestra modernidad artística– la redescubre para nosotros en su preocupación central por los aspectos matéricos y, pese a ello, en la no subordinación de lo sintáctico a lo semántico en su obra, entre otras cosas, y sugiere nuevos sentidos posibles de la impronta que deja en nuestra historia.
Como una extraordinaria mujer y como una artista que luchó, con convicción, por ser reconocida en el mundo del arte, fue recordada la artista plástica Lotte Schulz en su despedida en la mañana de ayer en el Museo de Bellas Artes, donde fue velada.